domingo, 22 de julio de 2012

¿Sabéis? Tenemos la extraña manía de exagerar nuestros sentimientos. Exageramos el amor que sentimos por los demás sin darnos cuenta. Cuando estamos con alguien le tratamos como si fuera el único en nuestra vida y sabemos que nada dura para siempre, y más el amor en estas edades. Somos jóvenes y estúpidos. Necesitamos atarnos a un 'siempre' aun que no sea real. Y luego cuando todo termina sufrimos porque ha terminado, o bueno, eso creemos. Porque para qué nos vamos a engañar. El sufrimiento por amor es pasajero. Nos dura dos o tres días y después nos damos cuenta de que nada de esto vale la pena. Que sufrir por alguien no hará que esa persona vuelva. Y un día, inevitablemente, llega otra persona. ¿Y todo aquel sufrimiento, qué? Desaparece. Desaparece con la esperanza de empezar una nueva historia con alguien. Y así es nuestra vida. Supongo que llegará el día en el que realmente amemos a alguien de verdad por el que valga la pena sufrir, pero hasta entonces, tenemos que equivocarnos. Y no arrepentirnos por hacerlo.

2 comentarios:

  1. Hola, podrías mirar mi blog, y darme tu opinión?
    Te importaría seguirlo?
    Gracias :)
    cuandoquieresdesaparecer.blogspot.com

    ResponderEliminar
  2. Me encanta tu blog y ya te sigo.
    Me gusta mucho como escribes y te expresas :)

    Si me lo permites quería decirte que yo también tengo uno:
    http://leerimaginarescribir.blogspot.com.es/

    Me alegraría mucho que lo visitaras y me siguieras. Y que me digas tu opinión sobre él. Muchas gracias. Te espero. Besos.

    ResponderEliminar