sábado, 10 de diciembre de 2011

Sí, lo admito.

Soy infantil, realista, torpe, quejica, algo mimada, amante de lo imposible, borde, de las que si se les mete algo entre ceja y ceja tienen que conseguirlo a pesar de todas las dificultades, pero con un un gran corazón. No valoro los 14 de Febrero, teniendo otros 364 días para demostrar lo que sentimos. Soy la que espera un empujoncito que le dé estímulos y emociones a su aburrida vida. Dejaré de luchar por lo que quiero cuando mi corazón dé su último latido. De las que cogerían una maleta y huirían lejos junto a la persona a la que aman. Una enamorada de los pequeños detalles de la vida y de cada mirada perdida hacía el infinito. Hablo sola, porqué soy la única que dice cosas con sentido. Tengo a alguien a quien dedicarle mis pensamientos más profundos o mis pequeñas sonrisas. Yo solo busco un "te quiero" sincero, no por interés. Me refugio en el rap cuando necesito un hombro amigo, y me motivo con el metal cuando necesito un subidón de adrenalina. Encontraré el amor, lo sé. Si tengo que morir, que sea cantando. Si tengo que vivir, que sea luchando. Vivo en un mundo lleno de falsas princesas con corona y de chicos cuya meta en la vida es ser un Barney Stinson. No tengo corazón, tengo un cáctus. Viviré en una mentira si así es la única manera de buscar una verdad. ¿Príncipe azul? Si de verdad existe, soy daltónica.

1 comentario:

  1. Pues amo esta entrada. Joder Amanda escribes g-nial ya nos podías dejar algo a las demás.. u.u
    Tequiero :3

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